Resumen:
Dos pares de especies, almacenadoras y no almacenadoras de comida, el carbonero palustre (Parus palustris) por un lado, y el arrendajo (Garrulus glandarius) y la grajilla (Corvus monedula) por el otro, fueron comparadas en un experimento de tareas de memoria asociativa. En la fase I de las pruebas los pájaros debían buscar alimento en uno de cuatro comederos, los cuales se diferenciaron entre sí durante todo el experimento por su ubicación espacial y porque había objetos clave a reconocer. Después de un intervalo de retención, los pájaros debían regresar al mismo comedero para obtener más alimento.
En las pruebas de control la disposición de los comederos no fue modificada, mientras que en la pruebas de disociación, esta disposición fue alterada para separar la ubicación espacial de los comederos y los objetos clave a reconocer.
En las pruebas de control no hubo diferencia entre las especies en cuanto al resultado. En las pruebas de disociación las dos especies almacenadoras se guiaron primero por la ubicación espacial correcta y después por los objetos clave correctos; por su parte, las especies no almacenadoras fueron primero y con igual probabilidad al lugar y objetos clave correctos.
La oclusión monocular se implementó para investigar los dos sistemas visuales. En las pruebas de control la oclusión produjo efecto; en las pruebas de disociación las cuatro especies tendían a regresar al comedero gracias al objeto clave correcto cuando se les cubría el ojo izquierdo y gracias a la posición espacial cuando se les cubría el ojo derecho.
Estos resultados sugieren que (a) los pájaros almacenadores de comida se diferencian de los no almacenadores pues responden preferiblemente a la información espacial y (b) tanto en los almacenadores como en los no almacenadores, cuando se cubre el ojo izquierdo en el sistema visual derecho se observa una tendencia hacia el objeto clave a reconocer, mientras que en el sistema visual izquierdo se observa una tendencia hacia la señal espacial.